
1
Utiliza passphrases
Son contraseñas de 3 o más palabras. Por ejemplo, descifrar “gallinaperrogatoconejo” llevaría varios siglos, el doble que “#sK8/aD+:”, y además es más fácil de recordar. Recuerda, que lo que hace fuerte una contraseña es la longitud, no su complejidad.

2
Amplia la autenticación multifactor (MFA)
Además de tener una contraseña robusta, utiliza siempre que sea posible la autenticación multifactor (MFA). Este método requiere formas de identificación adicionales y que solo tú tienes, como por ejemplo, un código que te llega al móvil, tu huella o reconocimiento facial.>

3
Utiliza gestores de contraseñas
No apuntes tus claves en un papel ni en las notas del móvil, utiliza un gestor de contraseñas. Estas aplicaciones te permiten guardar todas tus contraseñas y simplemente necesitas recordar una clave maestra para acceder a ellas.